Noticias

SEPLA reclama a los fabricantes que instalen sistemas de aviso de aire contaminado

Publicado

en

Los pilotos de todo el mundo llevan décadas comunicando «eventos de humo» o “sucesos de aire contaminado”. Se trata de una serie de episodios en los que pilotos y pasajeros notan un olor distinto en la cabina, similar al de un calcetín sucio.

Dicho olor es una señal de que el aire respirable, que se origina sin filtrar en los motores, está contaminado con aceite de motor calentado que contiene productos tóxicos. Las emanaciones gaseosas, tanto de aceites sintéticos para los motores de reacción como de los fluidos hidráulicos a los que a veces están expuestos los pasajeros y la tripulación de los aviones, contienen organofosfatos.

Los recipientes que contienen estos productos incorporan indicaciones de advertencia, como por ejemplo “no respirar los vapores de este producto calentado” y, además, subrayan el riesgo de padecer cáncer o posibles daños a la fertilidad.

Se han comunicado eventos de humo en todos los aviones de pasajeros, a excepción únicamente del modelo de Boeing 787

En los últimos años, se han comunicado sucesos de aire contaminado o eventos de humo en todos los aviones de pasajeros, a excepción un modelo concreto. El Boeing 787 ha sido diseñado con compresores eléctricos que impiden la aparición de esta clase de sucesos, ya que los eventos de humos suponen riesgos para la seguridad del vuelo y para la salud pública.

Hasta la fecha, se han realizado más de 50 recomendaciones y advertencias de seguridad, incluyendo una doble recomendación a la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) para que todos los aviones incorporen sistemas de aviso de aire contaminado. Aun así, EASA no ha realizado ninguna intervención ante esas recomendaciones e investigaciones.

La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) publicó en el año 2015 una serie de directrices sobre esta cuestión. Siete años después, ninguna aerolínea ha seguido estas pautas y tampoco se ha analizado el escaso reporte de estos sucesos que se producen de manera reiterada.

SEPLA trabaja para su instalación

Por todos estos motivos, Sepla trabaja para que los fabricantes de aviones instalen sistemas de aviso de aire contaminado en las cabinas de vuelo con carácter prioritario y para que, a su vez, incorporen sistemas eficaces de filtración de aire en las aeronaves.

Las empresas especializadas ya han desarrollado soluciones de filtración para los Airbus A320, un modelo de avión que sufre este tipo de incidentes de manera frecuente. Sin embargo, parece que Airbus no está apoyando la introducción de esta tecnología.

Se espera que en el año 2023 podamos contar con un análisis de sangre rápido que confirme la exposición al aire contaminado después de este tipo de sucesos. Podría ser una herramienta muy utilizada, tanto por los pasajeros como por las tripulaciones, tras un “evento de humos”.

Lo más visto