El fin de los vuelos comerciales en el aeropuerto de Burgos ya tiene fecha. El sábado 18 de diciembre habrá concluido el contrato suscrito entre la Sociedad para la Promoción y Desarrollo de la Ciudad de Burgos (Promueve) y Air Nostrum, por la que la aerolínea recibía anualmente 1,2 millones de euros.
El último vuelo que se operará desde Villafría tendrá lugar el día anterior, el viernes 19, con la última conexión de Burgos con el aeropuerto de Barcelona- El Prat, a través del vuelo IB8371, que realizará en un CRJ1000 la ruta entre ambas ciudades en poco más de una hora.
La decisión de no renovar el contrato entre la sociedad municipal y la aerolínea valenciana se ha llevado a cabo en el último pleno de la corporación burgalesa; con los votos a favor de los partidos que gobiernan la ciudad en coalición, PSOE y Ciudadanos, junto a Podemos y con la abstención del resto de grupos municipales: PP y VOX.
Vicente Marañón, presidente de Promueve, ha justificado la decisión en los pobres resultados que ha tenido la operativa desde junio de 2018, ante las protestas de la oposición que ha acusado al presidente de la sociedad municipal de “sentenciar de muerte” el aeropuerto de la provincia.
Fin a una larga historia común
Con la marcha de Air Nostrum, el aeropuerto de Villafría pone, por el momento, el punto final a su conectividad comercial, que se inició el 10 de julio de 2008, precisamente con un vuelo de Air Nostrum que conectaba la capital burgalesa con Palma de Mallorca.
Por el momento, la sociedad municipal Promueve estudia sacar a concurso un nuevo contrato de conexiones nacionales e internacionales, barajando alternativas a la conexión con el aeropuerto de Barcelona como París, con la premisa de que “sean de interés, tanto para los ciudadanos como para los empresarios” de la ciudad, ha explicado, el alcalde de Burgos, el socialista Daniel de la Rosa.